Octavilla que recoge los derechos de los pacientes y usuarios de Salud Mental
Como pacientes y usuarios/as del sistema de salud mental tenemos una serie de derechos de los que no solemos ser informados/as.
Somos personas que pasamos por situaciones de sufrimiento psíquico, y si acudimos al sistema de salud mental, es para que nos ayuden a paliar o a reducir en lo posible esos sufrimientos, no para que tan solo nos llenen la boca de pastillas mágicas. Los psicofármacos ayudan, pero las causas del sufrimiento siguen ahí, bajo los efectos de esas píldoras que nos hacen sentir algo mejor. Por eso hemos elaborado esta lista de derechos que nos corresponden y deberíamos tener en cuenta y exigir si fuera necesario:
- En los centros, servicios y establecimientos debe estar a disposición de todos/as la carta de derechos y deberes de los usuarios/as en relación con la salud y los servicios sanitarios.
- Tienes derecho a pedir y a tener una relación psicoterapéutica o de asesoramiento sobre problemas con el/la psiquiatra o el/la psicólogo/a, basada en la expresión y la elaboración de lo que te preocupa y hace sufrir, no aceptes como única respuesta la receta de un psicofármaco y un “vuelva usted dentro de un mes”.
- Tienes derecho a marcar el objetivo de la relación psicoterapéutica o de asesoramiento, nunca el/la profesional. Lo que tú esperas solucionar, es decir, lo que quieres del espacio que abrís, es el objetivo. Si planteas objetivos inalcanzables en el marco de una psicoterapia o asesoramiento, el/la profesional, te lo señalará de algún modo, pero aún corrigiéndolo o matizándolo conjuntamente con él/ella, siempre el objetivo lo debes marcar tú.
- Tienes derecho a que el/la psiquiatra o el/la psicólogo/a te explique con claridad, con palabras que tú entiendas, en esencia, el modelo con el que trabaja, es decir, cuáles son sus métodos. Qué formación y qué experiencia tiene. Si trabaja en equipo y si supervisa con otros/as profesionales sus casos. Cuánto tiempo, más o menos, durará cada sesión y cuanto tiempo, más o menos cree que vais a necesitar -una vez le hayas explicado tu problema y tu objetivo- para llevar a término el tratamiento.
- Tienes derecho a preguntar al/a la profesional todo aquello que, relacionado con la relación psicoterapéutica te preocupa y quieras saber.
- Tienes derecho a ser informado en un lenguaje claro, si es necesario que se te receten psicofármacos, de la correcta utilización de los medicamentos, los efectos esperados, los posibles efectos secundarios, las posibles interacciones con otros medicamentos o alimentos y de las alternativas existentes.
- Tienes derecho a opinar sobre la medicación que te receten a partir de tus propias experiencias personales o las de otras personas.
- Tienes derecho a que cada seis o siete sesiones reviséis como está marchando el tratamiento, es decir, ¿hasta dónde habéis avanzado respecto al problema que te llevó a solicitar ayuda a un/a profesional?, y a que valoréis juntos/as si han surgido problemas nuevos que abordar.
- Tienes derecho a ser informado/a de si los procedimientos de pronóstico, diagnóstico o terapéuticos que se te están aplicando son o pueden ser utilizados para un proyecto docente o de investigación, que en ningún caso podrá comportar peligro adicional a tu salud. En todo caso es imprescindible tu previa autorización y por escrito y la aceptación por parte del médico y de la dirección del centro sanitario.
- Tienes derecho a acceder a la documentación de tu historia clínica, así como a que te den si quieres una copia de los datos que en ella figuran.
- Tienes derecho a la libre elección de médico/a y de institución sanitaria. También tienes derecho a cambiar de médico/a psiquiatra o psicólogo/a si no estás de acuerdo con su práctica médica o su trato humano.
- Tienes derecho a solicitar una segunda opinión.
- Tienes derecho a plantearle al/la psicoterapeuta tus dudas sobre si estáis avanzando o no en la relación de ayuda. Y si no estáis avanzando tienes derecho a que te deriven a otro/a profesional.
INDIVIDUALIDADES PSIQUIATRIZADAS EN LUCHA